CUARTA FECHA en imágenes

El video que grabé el día de la cuarta quimio y que recién ahora pude editar.

No solo se aceptan, animan y agradecen los comentarios. También, se exhorta a que el amable público ejerza la cordial y amistosa, siempre sincera y franca, posteaficación de esos comentarios. En este mismo espacio y sin cambiar de andén.

¡Mucho gracias por mirando! 

Cuarta fecha del campeonato

Día duro el de ayer.

Los buenos momentos duraron poco y estuvo acostada mucho tiempo por debilidad, una pizca de náuseas y un toque de dolores. Un poco de angustia disparada por los dolores, por algún mareo y, sobre todo, por las náuseas.

Ayer, sábado, había una reunión de amigos y yo quería ir. Ella también, pero lo más seguro era que no iba a poder. Preguntó un poco para ver si alguien en las cercanías podía venir a hacerle compañía pero, siendo sábado, es lógico que la gente se arrejunte en familia y no hubo respuesta.

Ella quería que yo vaya igual y la deje sola lo que finalmente no se pudo, como me imaginé. Las molestias no se iban.

Así es la cosa.

La enfermedad se va yendo, esperamos todos que para siempre, los indicadores son todos buenos. Pero, en el proceso, las hordas de repugnantes y horripilantes efectos secundarios joden bien jodida la vida.

Ahora duerme bajo el hechizo del Benadryl. Que, aunque popularizado por su efecto antihistamínico, también cumple funciones en el frente de batalla contra las náuseas.

Hoy el ánimo estuvo más alto y salimos un poquito a hacer mandaditos. La caminata corta por el estacionamiento le cuesta por la debilidad y vuelve a su casa a dormir como un bebé.

Nada que los médicos y enfermeras no nos hayan explicado que pasaría.

Tengo un pequeño videíto del jueves en la sala de quimioterapia, pero hasta que tenga acceso a la compu de mi casa, no puedo editar como dios-manda. Ya lo postearé.

El viernes fuimos a un elegantón hotel del centro de Seattle, el Renaissance, donde una asociación de lucha contra el cáncer daba una serie de charlas para sobrevivientes de cáncer de ovario. Estuvo muy interesante e informativa. Ofrecieron desayuno y almuerzo, todo gratarola.

http://www.foundationforwomenscancer.org/

Una cosa que dijeron con mucha seguridad y que me llamó la atención: 

las pastillas anticonceptivas pueden prevenir el cáncer de ovario.

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El naan nuestro de cada año

No se por qué, realmente. Algo me dice que es algo de los argentinos y la comida. Tengo que remontarme a los años que han pasado. Es un hecho que crecí en Argentina. La comida y Argentina. Puede ser, sí, puede ser que la cosa esté cambiando. Cambio para bien. Pero el cambio es ahora y yo no estoy, yo cambié con el vaivén de los desplazamientos geográficos. Y es también un hecho que durante mucho tiempo, como un animalito salvaje por el bosque, yo comía para alimentarme. Hoy, ya con los años, esto ha cambiado un poco.

No me pidan que explique por qué, no sé si voy a poder, pero sí puedo contar como se dio esta mano alimenticia.

Me acuerdo de cuando llegué a andar por este país, EUA. En este país, en toda ciudad de cierto tamaño y, por lo general ciudades ubicadas más bien en las costas del mar o de algún lago grandote como el mar, hay infinidad de restaurantes variados, muy variados e internacionales. Las ciudades del centro son mucho más conservadoras. Hace diez años, cuando estaba recién llegado recuerdo clarito un cierto prejuicio alimenticio que no puedo dejar de atribuir a mi condición de argento.

Sí, sí, ya se, ya te dije… la cosa está cambiando. Pero, ¿dónde? Sí, en Palermo Sójo está lleno de restaurantes orientales, indios, mexicanos (con equis, con jota, no) y de otras denominaciones. En Mar Del Plata y en Córdoba, aunque en menor medida, seguro que también. Pero, está el porteño canyengue y el gringo cordobés que si no le servís un bifecito todos los días, protestan, ¿decime si no?

Me acuerdo que tímidamente y con cierto resquemor, me apersoné alguna vez a comer comida india. En Boston fui a un restaurante tai porque mi grupo de turistas eso quería comer. La situación de lo picante era medio decisiva en estas lides porque me costaba mucho. Pero de apoco, fui probando. Estuve en Tailandia y ese fue mi paso decisivo porque tenés que comer picante. Medio que no queda otra. Yo ya había empezado a dar algunos pasos en esa dirección pero me acuerdo de que mi hermano Seba comía un picante que yo no podía. Ahora puedo, jé.

De a poco fui probando comida por acá y por allá. Mi primo, que vive en la capital, Washington DC, decía que su comida favorita es la de la India. Yo lo miraba de costado, desconfiado. Qué curioso, hoy me encanta, pero me encanta, la comida india, fijate.

Recorriendo los pagos

En 2005 fui a Buenos Aires y me compré un Peugeot con el que recorrí un poco el país. Paré en muchos pueblos y ciudades, comí en fondas, parrillas y restaurantes finolis de la alta sociedad pampeana o del turismo patagónico. Siempre lo mismo en el menú. Y no es que no me guste, me encanta porque es mi comida, la que uno extraña en tierras alejadas y llenas de extranjeros, pero es así: siempre lo mismo y con mucha carne al plato. ¡Cómo no se nos van a estreñir los visitantes! Es una de las sabias conclusiones que saqué en ese viaje de 12 mil kilómetros por el territorio telúrico, grito aguerrido y gauchesco de mi gente sureña.

Por ejemplo, el jalapeño ha gozado de la representación misma de lo meramente picante. Por alguna razón mi prejuicio alimenticio me indicaba que el jalapeño tenía la propiedad de ser picante y nada más. Hoy puedo decir que me gusta muchísimo el jalapeño. Aprendí a sacarle el picante, si así lo quisiera, y descubrí que tiene un sabor fantástico.

Esta noche de mayo degluto una pasta que también le empecé a prestar atención de repente y ahora tengo muy en cuenta que está en la lista de las comidas que me gustan: el humus. Y tanto mejor si es HUMUS CON AJO.
Dicho sea de paso, me gusta la comida de medio oriente pero sin aceitunas, claro.

► En esta crónica no puedo dejar de hacer la aclaración que también la comida mexicana me gusta mucho.

De fondo, música de Los Estelares que también me gusta.

Se me le extendió, ustedes sabrán disculpar.

NAAN: un pan plano, elaborado de harina de trigo y generalmente sin levadura, es de consumo corriente en varias regiones de Asia central y de Asia del sur: Afganistán, Irán, Uzbekistán, Birmania, Pakistán y la India del noroeste (principalmente en el Rajastán y élGuyarat).

La cuarta fecha

Jueves a las siete y media de la mañana.

Estamos aprontándonos para salir hacia el Northwest Hospital donde la esperan las drogas quimioterápicas.

América está de buen ánimo aunque un poco preocupada. No durmió muy bien pero sabe que se va a sentar en ese sillón y se quedará bien dormida por unas horas y eso la tranquiliza.

En algún lado de este mar de techos grises, suena una alarma. Con la ventana abierta la escuchamos muy bien y, después de las sirenas, se ve llegar a los bomberos. Pero no podemos a ver qué pasó porque el problema nos queda tapado por un edificio. 
Como finalmente llegó la primavera a esta parte del mundo, nos levantamos temprano y abrimos la ventana para que entre aire con rayos de sol diluidos, el sol que se viene ocultando hace mucho. Anoche en las noticias dijeron que desde octubre no hay 4 días seguidos de sol en Seattle. Perame que saco la cuenta… (…y 8, 24 y 8, 32…)… como un rato largo sin cuatro días seguidos de sol, ¿no?

Jueves, día de la cuarta quimioterapia. Todos decimos “falta poco, en dos meses va a haber terminado casi todo”. Pero para ella el tiempo es chicle y esos dos meses, tiempo tan corto para nosotros, es una pequeña eternidad.

Pensé que hoy el ánimo estaría un poco más decaído  pero no es así, por suerte. ¿Será el sol? 

América estuvo con sus nenas y haciendo gimnasia. Estaba contenta anoche porque hay máquinas nuevas en el gimnasio del complejo Archstone, su lugar de residencia. Siempre me dice que: “hacer ejercicio me hace mucho bien”.

Hice cambios en el trabajo, así que esta noche y mañana voy a poder estar con ella.

Seguimos en carrera.

Bebidas sureñas

En el día de la fecha cumplimos en comunicar que ciertas deficiencias han sido remediadas con la adquisición de los elementos necesarios para el correcto desempeño de las acciones telúricas y gauchescas, si se quiere.

Nos hemos apersonado por La Superior en la localidad de Bellevue.
(La Superior 900 160th Avenue NE # 7, Bellevue, WA 425-747-2488 ‎) 
¡Tienen tapas de empanadas, de tarta, alfajores y dulce de leche! 

Ahora los damos de compañía y agentes argentinos al cuidado de América contarán no solo con termo, sino también con termo Lumilagro (más típico no se puede) que ostenta imagen azul y oro, por la que jamás hubiera optado si no fuera que estoy acá, a 11 mil kilómetros de la Pampa Húmeda, ¡grito maula y pendenciero del azabache chúcaro en el cuadro de la festuca salvaje ánde supo verse la luz mala!

Aquellos que siempre se han preguntado “¿Cuánto cuesta un paquete de Taragüí de medio kilo en Estados Unidos?”, encontrarán aquí la respuesta. La foto se agrandifica con un solo clic, una maravilla vea mire.

La Superior, mayor información:

AQUÍ

América duerme

SSSH... (en voz baja, susurrando)
Cada hora que pasa en esa cama siento como si descansara yo también. Es una hora menos de náuseas o dolores.

Hoy tenía terapia física o fisioterapia pero no fue por el cansancio y las náuseas que, por suerte, no están todo el tiempo con nosotros, a pesar de que estamos alerta; la sirena del ataque aéreo de la Republiqueta Náuseas puede llegar en cualquier momento.

Mientras tanto, yo limpio, acomodo, lavo ropa o escribo pavadas que después posteo en algún espacio virtual que quién sabe cuántos leen…

Domingo primaveral

Diana dejó la heladera (refrigerador o nevera) hecha una pinturita de limpieza y orden. Reorganizó todo y debo decir que se ve mucho mejor.

Como el día está lindo, más tarde América me hizo una “gringa” que comimos sentados en el balcón. Se trata de una quesadilla con carne. En mi viaje por el norte de México aprendí a llamarla “chorreada” pero después de esa vez, ya nadie me entiende cuando digo “chorreada”. 
Más tarde, ya en la ciudad de México, aprendí que le dicen “gringa”.
También entra en la categoría de “sincronizada” porque lleva dos tortillas a diferencia de los tacos, enchiladas y quesadillas que llevan solamente una.

Vista aérea de las macetas floridas

Ya que estamos en tema balcón les dejo una vista parcial de mi trabajo jardinerísteco en las macetas del balcón de América. Ella lo llama “terraza”.

Aclaración: macetas en preparación.

No dejen de ver en este cyberlugar el desenlace que tendrá este mismo espacio en un tiempo ya que tengo en marcha un plan de reforestación y florificación que estoy seguro le caerá muy bien. La idea es la estilización del espacio con fines bien claros y definidos: alegrarle en lo posible la vida a América.

Actividades y circunstancias post-quimio

El jueves pasado se cumplió la tercera quimioterapia

Jueves a las 10 de la mañana , lista para empezar la quimio (III)

América está con náuseas tempranas. Normalmente este tipo de mounstruos troglodíticos espera unos cuatro días después de la quimioterapia para apersonarse y hacer estragos. Esta vez se nos apareció antes; el regimiento de fármacos hace lo suyo, aunque no todo el tiempo ni con la eficacia que uno quisiera. Las nauseas la persiguen y la atosigan pero esta vez con menos angustia. ¿Será que el antidepresivo está empezando a cumplir con su misión?

Una preocupación que América tiene es la de la limpieza de su departamento. Este día domingo (día internacional del trabajador en todos lados menos en EUA), me dispongo a armarme de escobas aire-tierra y químicos de agradables aunque artificiales fragancias para atacar la mugrecita en suelos y baños.

Diana, que es de México y colega intérprete médica además de vivir cerca, se apersona por estos rincones de Redmond, estado de Washington, para dar una mano y cuatro o cinco dedos, con diligencia, energía y eficiencia. La ayuda se aprecia en grados de tenor alto.

Nunca se sabe cuándo será necesaria la colaboración para la puesta en escena del teatro de operaciones anti-roña y es por eso que la llamada sale con aviso más bien corto que se espera sabrán todos disculpar.

Diana, gracias de a millonadas.

Nombro a Diana porque la acabo de ver y tengo su foto para publicar. Pero hay mucha gente que hace lo suyo en otros momentos. Amigos, compañeros de trabajo, parientes y el papá de Daniela y Denise.

A todos los que se apersonan a proveer transporte, compañía o alimentación como a quienes llaman allende fronteras y continentes para presentar sus saludos y entusiastas deseos de mejores tiempos y recuperaciones, ¡MUCHAS GRACIAS!